Ha llegado a Televisión Española una nueva ficción. La historia de la serie nos transporta al año 1763 , donde Adriana Salcedo de la Cruz se ve obligada a abandonar la Villa de Madrid y emprender un viaje al norte de España para cumplir con su compromiso matrimonial . Debe encontrarse con su futuro esposo, a quien aún no conoce, y alojarse en la casa de su tía, la hermana de su padre fallecido. A partir de ese momento, su vida dará un giro inesperado : experimentará el amor verdadero, sufrirá traiciones y pondrá su vida en riesgo mientras intenta desentrañar el misterio que rodea la muerte de su padre. Además, la producción destaca por su excelente trabajo en cuanto a vestuario y localizaciones, buscando recrear con fidelidad el contexto histórico en el que se sitúa la trama. Rafael no está de acuerdo con la manera que tiene Gaspar de llevar la finca, se lo hace saber a Julio y le pide que empiecen el barbecho. Las discrepancias por la finca provocan que los hermanos lleguen a las manos. Victoria continúa presionando a Isabel para que acabe con un muy recuperado Pedrito. Isabel debe intentar volver a ganarse al niño, que está encantado con Luisa. Matilde, que se siente lejos de su marido, intenta que Julio le muestre apoyo y consideración en el trabajo, buscando un acercamiento con Gaspar. Bárbara cree estar conectando con Alejo en un sentido romántico, cuando la realidad es que este la usa para dar celos a Mercedes. Rafael se sincera con Adriana: la verdadera razón que ha desatado su ira contra su hermano ha sido por ella, no soporta la idea de perderla una vez suceda la boda. Pilara descubre algo de José Luis que la deja en estado de shock. José Luis abronca a sus hijos por la pelea. Julio parece aceptarlo, pero Rafael se rebela por la diferencia de trato, una vez más. Adriana y Luisa tienen una relación cada vez más cercana y, de manera velada, Luisa advierte sobre el hecho de casarse con un desconocido. Julio nombra a Gaspar máximo responsable de la finca, ascendiéndole por encima de Rafael, que se marcha de casa en señal de protesta. Gaspar rechaza a Irene por primera vez y se disculpa con Matilde, a quien agradece que sea la responsable de su ascenso. Alejo y Mercedes por fin dan el paso que ambos estaban esperando y certifican su relación. Adriana trata de mediar entre Isabel y Luisa. Isabel finge arrepentimiento y tiende la mano a Luisa, que cree que han limado asperezas. Pilara interroga a Isabel y le mete el miedo en el cuerpo; Victoria se encargará de solucionarlo. Rafael no ha vuelto a pisar la casa y Pilara trata de interceder por él con José Luis, además de volver a mostrar su disconformidad ante la boda. Adriana, alarmada, decide ir a buscar a Rafael. Gaspar agradece el ascenso a los Gálvez de Aguirre. Mercedes y Alejo planean fugarse, mientras Pilara sorprende a Bárbara, conocedora de lo que siente por Alejo. Victoria anima a Isabel a ganar terreno frente a Luisa y mueve a su hijo a romper con Irene para no poner en peligro su posición de capataz. Alejo rehúye de un nuevo acercamiento de Bárbara. Adriana se reencuentra con Rafael. Julio confirma a Pilara que la familia está en la ruina e Isabel fuerza un accidente que pone en peligro el embarazo de Luisa. Adriana manda llamar a Atanasio, que recomienda reposo a Luisa, pero Victoria, de espaldas a sus sobrinas, se ocupa de obligar a Luisa a trabajar. Irene interrumpe una discusión entre Rafael y Julio y descubre el motivo. Alejo y Mercedes siguen adelante con sus planes de fuga. Bárbara, ajena, se lanza a besar a Alejo, al que acaba confesando su amor, pero él le rompe le corazón. Pilara sorprende a Adriana, tratándola con cariño, por primera vez y, tras enfrentarse al recuerdo de Antonio, Adriana le acaba confesando a Pilara la verdad sobre su muerte. Irene informa a Pilara de la humillación que ha sufrido Rafael, al que han arrebatado el puesto de capataz y Pilara se encara con José Luis, al que hace recapacitar. Por orden de su padre, Julio vuelve a degradar a Gaspar y le devuelve el puesto a Rafael. En un momento de ternura con Pedrito, Luisa vuelve a sentir a su bebé y Adriana sorprende a Rafael con una decisión firme: no va a seguir adelante con esa boda. Movido por Pilara, Rafael hace las paces con Julio y vela por la unión de los hermanos. Victoria culpa a Pilara de la humillación sufrida por Gaspar, quien paga su rabia con Matilde. Victoria intima con José Luis y Pilara es testigo accidental. Celosa y rabiosa, Pilara se enfrenta a Victoria. Bárbara y Adriana se imponen para que Luisa pueda guardar reposo, pero Victoria no lo permite. Alejo y Mercedes siguen adelante con sus planes de fuga. Mercedes escribe una carta de despedida a su hermana y vuelve a humillar a Bernardo. Pilara se dispone a contarle a Adriana lo que ha averiguado sobre su tía, pero José Luis las interrumpe. Las Salcedo de la Cruz celebran con los Gálvez de Aguirre la última cena antes de la boda y Rafael frena, disimuladamente, a Adriana antes de que se atreva a dar el paso que prometió. Irene se sincera con Gaspar y este vuelve a caer en sus redes.
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