El conflicto comercial abierto entre China y la UE se recrudece por momentos. Si la semana pasada veíamos como China denunciaba que los aranceles de la UE eran "prácticas ilegales" y a la UE respondiendo; China tomó finalmente una decisión de consecuencias gigantescas para la industria de muchos países y, en conjunto, también de la de UE. El Gobierno chino instó a sus empresas a no invertir en aquellos países que habían apoyado la aprobación de los aranceles. Las instalaciones de Stellantis en Tychy, donde se iba a fabricar el Leapmotor B10. China ha puesto en la lista negra a los países europeos más a favor de los aranceles. Así, países como Alemania o Hungría, que votaron en contra de los aranceles -sólo lo hicieron cinco de los 27 miembros de la UE-, y otros que se abstuvieron en la votación -doce en total-, todavía podrían recibir inversiones en forma de fábricas por parte de las marcas chinas. [articles:76885] Pero, mientras tanto, otras 10 naciones como Dinamarca, Irlanda, Estoni
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