Claudia Sheinbaum, la sucesora de Andrés Manuel López Obrador que ganó holgadamente las elecciones presidenciales de junio, tomará posesión este martes primera presidenta de la historia de México , con la tarea de hacer frente la inseguridad ciudadana, la lucha contra el narcotráfico o la crisis migratoria. En clave internacional, la relación del Gobierno mexicano con España, país con el que mantiene un fuerte vínculo histórico y cultural, además de un intenso intercambio económico y comercial —México es el principal socio de España en Iberoamérica—, atraviesa un momento de crisis después de que la presidenta electa no invitara al Rey Felipe VI a su toma de posesión. En respuesta a la «inaceptable exclusión» del monarca del protocolo de invitados, ningún representante del Gobierno de España asistirá al relevo presidencial de este martes. El Ministerio de Exteriores cerró filas con el Rey y, en un comunicado, decidió «no participar en dicha toma de posesión a ningún nivel». El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien mantuvo una «tensa» llamada con Sheinbaum , calificó de «inaceptable» e «inexplicable» la decisión de México , que atribuyó a «un interés político». Pese a la postura de rechazo del Gobierno, representantes de Sumar, Podemos, Bildu y BNG viajarán hoy al país para asistir a la toma de posesión de Sheinbaum. En concreto, eurodiputada y exmnistra de Igualdad, Irene Montero , acudirá con el coportavoz de Podemos, Javier Sánchez Serna , en representación del partido. La exalcaldesa de Barcelona Ada Colau , que ya se encuentra en el país, asistirá también como invitada. Por parte de Sumar, acudirá a la cita el diputado Gerardo Pisarello ; mientras que de Bildu, viajará Jon Iñarritu y del BNG, Ana Pontón . ERC, que se ha alineado con México en la crisis diplomática , alega que sólo ha declinado por motivos de agenda. Su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, reclamó «respeto» tanto al país como a su «soberanía» y ensalzó que «México es una república gobernada por unos dirigentes votados y electos». Este martes, el portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, ha confirmado que habrá representación de su grupo parlamentario en el relevo presidencial. Errejón ha defendido que es «compatible» que asista un diputado de Sumar que «no forma parte del Gobierno» y, a su vez, se respalde la posición del Ejecutivo como socio minoritario. «Nuestros compañeros y compañeras que forman parte del Gobierno, obviamente, son leales a la posición política que marca, en este caso, el Ministerio de Exteriores », ha explicado en una entrevista en TVE. «Más allá de los conflictos concretos o de las disputas que haya de carácter retórico y discursivo, tenemos muy buena relación con la primer mujer presidenta de México, que tiene como prioridad la justicia social, la igualdad de los mexicanos y las mexicanas y la soberanía nacional y popular», ha subrayado el portavoz de Sumar sobre la «simpatía» de su formación con el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) , el partido de Claudia Sheinbaum. Irene Montero confirmó en la red social X su presencia en la toma de posesión de la nueva presidenta de México, en su mensaje en el que no dudó en cargar contra la Monarquía. «Allá vamos, a acompañar y aprender del pueblo de Mexico y su cuarta transformación, y a arropar a la presidenta Claudia Sheinbaum. Somos pueblos hermanos y, a pesar de la monarquía española , debemos construir relaciones basadas en el respeto mutuo y los derechos humanos», enfatizó. Su compañero de partido Javier Sánchez Serna, ya en Ciudad de México, ha ironizado en que podrá asistir porque « se habían quedado libres unos asientos que correspondían a los Borbones y a los ministros monárquicos del PSOE», al tiempo que ha destacado el papel de México frente a «una Europa que se desliza hacia la extrema derecha y hacia el régimen de guerra». «México es hoy una feliz anomalía. Aquí pusieron coto al neoliberalismo y mantienen a raya a la extrema derecha para desesperación, claro, de las oligarquías mexicanas y de la derecha española», reza su mensaje en X. La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón , lleva también varias horas en México, donde se ha reunido con el presidente del Senado de ese país, Gerardo Fernández Noroña, para «compartir reflexiones sobre los lazos que unen Galicia y México».
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