La batalla de audiencias entre 'El Hormiguero' y ' La Revuelta' está siendo totalmente imprevisible. Este martes, con la visita de Ricardo Darín , Pablo Motos y sus hormigas anotaron su mínimo de temporada: 13,3 % de cuota de pantalla y una media de 1,7 millones de espectadores. Su rival barrió al formato contando con la presencia de Eduard Fernández e Israel Fernández ; el actor y el cantaor lograron para David Broncano 2.049.000 espectadores de media y un 15.6% de 'share'. Con ese panorama recibió Motos la noche del miércoles 25 de septiembre a una pareja de invitados que prometía inundar el plató de risas. Efectivamente, así fue. Los Morancos visitaban el programa de Antena 3 para hablar del espectáculo 'Bis a Bis' , que está a punto de estrenarse en el Teatro Capitol de Madrid. Y protagonizaron una de las entrevistas más disparatadas de los últimos meses en el formato. Tanto es así que a punto estuvo de no producirse, pues Jorge Cadaval se sintió muy molesto al descubrir que su hermano formaba parte del club 'infinity' del programa, mientras que él se tenía que conformar con la categoría de invitado platino, cosa que no entendía. De verdad, es que no tengo ni ganas de sentarme. «Me ha cortado el rollo. Además mi hermano tiene mucha guasa y empieza a decirme cosas», se quejaba el mayor de los Cadaval, quien no entendía por qué César había acudido una vez más a 'El Hormiguero' «¿Cuándo has ido tú a anunciar el teatro sin mí?», protestaba otra vez. «En 2008. Me acuerdo perfectamente», afirmaba el otro miembro de Los Morancos, echando más leña al fuego, pese a asegurar que «lo conozco perfectamente, está cabreado de verdad». Pero mientras que César se lo tomaba a risa, Jorge siguió mostrando abiertamente su enfado por sentirse ninguneado, hasta el punto de arrepentirse de haber ido. «Si yo llego a saber que voy a venir y soy tarjeta plata…», dejaba caer. Intentando calmar los ánimos, Motos intentó razonar y explicarle que «César es invitado 'infinity' porque ha venido 20 veces». El lograba que se sentara, aunque Los Morancos continuaban desvariando y el mayor de los hermanos acaba parodiando a Puigdemont. «Vamos a cambiar el mal rollo», insistió el de Requena. Sin embargo, Jorge volvía repetir que «no es por mal rollo, pero a mi no me ha sentado bien». «Pero si aquí lo que venimos es a decir que el día 4 de octubre estamos en Madrid», cortaba el otro Moranco de raíz, yendo al grano con el motivo de la entrevista. El agraviado parecía algo más contento de visitar en 'El Hormiguero' y así lo señalaba Motos, aunque él lo desmintió alegando que «no estoy bien, pero voy a estar aquí».
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