El problema con Renfe va más allá de los retrasos, averías y aglomeraciones en las estaciones. No se trata sólo de falta de puntualidad o demoras por incidencias, derivados de fallos en los trenes y en las vías. El deterioro del servicio queda constatado desde los mismos horarios ofrecidos por la propia compañía. Los tiempos de los viaje publicados por el operador público de la red ferroviaria son más lentos que el año pasado, tal y como reflejan sus cuadrantes. El análisis de los tiempos de viaje entre todas las localidades con estaciones de tren de media y larga distancia y alta velocidad, a partir de los horarios ofrecidos por la propia compañía, arroja que uno de cada cuatro viajes... Ver Más
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