El Girona es un drama en la Champions: no tiene gol y pierde con estrépito contra el PSV (4-0)

La falta de contundencia del Girona en las dos áreas está condenando al equipo de Míchel en la Champions League (4-0). En la visita del conjunto catalán al PSV, el equipo catalán generó lo suficiente para adelantarse a domicilio, pero sin gol no hay paraíso en la Copa de Europa. Y ya no están Dovbyk, Savinho ni el lesionado Tsygankov. El PSV, aliviado por la ausencia de determinación del conjunto español, golpeó primero tras verse contra la lona con los tantos de Flamingo y Tillman en la primera parte y de Bakayoko y Krejci, en propia puerta, en el segundo tiempo.

A pesar del espectacular rendimiento de Miguel Gutiérrez, el Girona se marchó sin marcar y sin puntos de Países Bajos. Solo ha sumado tres unidades en cuatro jornadas en la que debía ser una temporada de disfrute en Europa. El cuadro catalán demostró en Eindhoven por qué fue uno de los mejores equipos de Europa la temporada pasada y por qué no está consiguiendo repetir la hazaña.

El conjunto de Míchel salió decidido a asaltar la casa del PSV y estirar al máximo sus opciones de avanzar a la siguiente ronda de la Champions League tras el triunfo contra el Slovan en Montilivi. La presión alta catalana, junto a la verticalidad en campo rival y al atrevimiento de sus futbolistas, generó tres ocasiones claras en los primeros 10 minutos a domicilio.

Flamingo celebra el 1-0 del PSV. (Reuters/Piroschka Van De Wouw)

Yangel Herrera perdonó un cabezazo cuando entraba solo en el área rival y, tras el disparo desde la frontal de Krejci, Miovski falló a bocajarro una doble oportunidad. Sin embargo, el Girona no castigó y el PSV se lo hizo pagar muy caro. Sin Dovbyk, Tsygankov ni Savinho, el Girona careció de colmillo pese al agresivo plan de Míchel. Los neerlandeses se crecieron para responder con dos ocasiones consecutivas, una de Tillman y otra de Noa Lang tras un rechazo al medio.

A la tercera no hubo fallo, un saque de banda de Tillman lo cazó Flamingo, despegándose de Selvi, y superando a Gazzaniga. El Girona, sin pegada arriba a diferencia de la temporada pasada, volvió a comprender que la Champions League la marcan los pequeños detalles y los grandes jugadores. A Míchel se lo llevaron los demonios por encajar un gol de pizarrín en el minuto 16. El técnico, que anhelaba robar arriba una y otra vez, se frustró cuando el PSV superó su presión.

Miguel Gutiérrez, un lateral con cerebro de mediapunta

Miguel Gutiérrez, verso libre por dentro y genio en la frontal, era el mejor jugador en ataque de los catalanes. Un futbolista indetectable entre líneas que el Real Madrid tiene en el radar y cuya capacidad ofensiva es más digna de un mediapunta. Su posición adelantada, móvil e imprevisible, hizo sufrir al PSV. El equipo neerlandés jugó sus cartas, especialmente tras colocarse por delante.

En otro contragolpe, Bakayoko forzó una mano imperial de Gazzaniga, muy exigido, y Lang volvió a probar fortuna en una gran acción individual. Los extremos locales fueron un quebradero de cabeza para el Girona. Los gerundenses siguieron muy activos en ataque y encontraron opciones claras de peligro. El problema es que la falta de talento siempre dejaba el gol a centímetros, porque fallaba el último pase, ya fuese de Miovski o de Van de Beek. No así el PSV.

El canterano del Real Madrid fue el mejor del Girona. (EFE/Maurice Van Steen)

David López y Arnau siguieron a Tillman con la mirada en una jugada muy mal defendida, como el 1-0, y el jugador local anotó el segundo tanto en el 33 con un disparo raso. El PSV acabaría llegando al descanso por encima del marcador gracias a su pólvora ofensiva y a los fallos en la definición del Girona. Los catalanes reclamarían un posible penalti sobre Miovski que se perdería por el limbo.

Sin pólvora y con uno menos

El Girona no pudo mejorar en la segunda parte. Nada más salir del vestuario, Luuk de Jong estrelló la pelota en un remate franco. Los gerundenses tenían muchas dificultades para sacar la pelota jugada desde atrás por la presión de los jugadores del PSV. De una falta botada por Miguel Gutiérrez, Arnau Martínez mandó la pelota a la madera, pero estaba en fuera de juego.

Arnau Martínez, tras ser expulsado. (Reuters/Piroschka Van De Wouw)

Míchel estaba a punto de mover el banquillo en busca de una reacción cuando Arnau Martínez arrolló a Lang y el defensor del Girona vio la segunda amarilla. Los catalanes jugarían con 10 futbolistas desde el minuto 55 de la segunda parte. El PSV sería muy superior a partir de ese momento, embotellando al Girona y cargando el área una y otra vez.

De Jong rozó el tercer tanto, Til también perdonó dentro del área pequeña y a Saibari le anularon un gol por falta sobre Krejci. Ya en el minuto 83, el PSV coronaría el dominio sobre el Girona con el gol de Bakayoko, un puñal por la banda derecha que condujo por donde quiso. El equipo neerlandés ahondaría más en la herida del Girona y Krejci se marcó en propia puerta en el minuto 88. El PSV logró su primera victoria en la Champions League y el Girona, que solo ganó al Slovan de Brastislava, sigue en caída libre en la competición más prestigiosa del viejo continente.

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