La Audiencia de Girona ha condenado a un cabo y dos mossos de la Unidad de Investigación de la comisaría de Santa Coloma de Farners (Gerona) a penas de hasta 10 años y 9 meses por robar marihuana procedente de operaciones policiales y reintroducirla en el mercado negro. En la sentencia, el tribunal castiga a un cabo con la pena más elevada, diez años y nueve meses de cárcel, por un delito contra la salud pública de sustancias que no causan daño a la salud agravada por ser funcionario público y haber actuado en el ejercicio de su cargo; por un delito de hurto con la agravante de prevalerse del carácter público, por un delito pertenencia a grupo criminal y por falsedad documental. También lo condena a una multa de 14.245 euros y a la inhabilitación para ejercer como policía durante el tiempo de la condena. A los dos agentes del cuerpo policial el tribunal los ha condenado a diez años, un mes y un día y 17.582 euros de multa y a nueve años, nueve meses y 16 días, así como a multa de 14.245 euros respectivamente. Los considera autores de delitos contra la salud pública con la agravante de ser funcionarios públicos y haber obrado en el ejercicio de su cargo, culpables de delitos de pertenencia a grupo criminal y de cooperadores necesarios de un delito continuado de hurto y, en el caso del primero, por descubrimiento y revelación de secretos, mientras que al segundo lo condena por falsedad de documento público. En ambos casos, la sentencia incluye la inhabilitación especial para empleo o cargo público, en concreto para ejercer como policía, ya en los Mossos d'Esquadra o en otro cuerpo, durante el tiempo de la condena. En el caso de los otros dos procesados, el matrimonio que presuntamente se encargaban de distribuir la droga, el tribunal ha condenado al hombre a dos años y tres meses de prisión y a una multa de 10.989 euros por un delito contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal mientras que a ella la ha absuelto.
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