Decenas de individuos, 60 según los datos disponibles hasta ayer, entre los que hay algunos menores, han sido detenidos por las Fuerzas de Seguridad acusados de saquear comercios, viviendas y hasta vehículos. Hay que aclarar desde el principio que no se trata de personas que, angustiadas, entraron en un supermercado a coger un poco de agua o alimentos. No; buscaban artículos que luego puedan tener salida en el mercado negro, como joyas, teléfonos, una consola o jamones. Algunos actuaron en solitario, pero otros en grupos, alguno organizado, de una composición hetereogénea. Mientras las Fuerzas Armadas, las de Seguridad, Protección Civil y miles de voluntarios trabajan sin descanso, algunos indeseables intentan aprovecharse de la tragedia. Aunque repugna sólo pensarlo, tanto la... Ver Más
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