La Diputación de Valencia aprueba su primer Plan de Simplificación Administrativa con el objetivo de reducir la burocracia y facilitar los procedimientos a la ciudadanía y las empresas. El decreto firmado por el presidente de la corporación provincial, Vicent Mompó, contempla la constitución de una Comisión de Coordinación que establecerá los criterios de simplificación y calidad normativa, así como un plazo de dos años para desarrollar y aplicar el nuevo plan. En palabras de Mompó, «la eliminación de la burocracia y facilitar las gestiones a los ciudadanos y los ayuntamientos era uno de los principales objetivos que se marcó el equipo de gobierno de cara a la presente legislatura. Tenemos la responsabilidad de adaptar la normativa a los cambios legislativos y de mejorar la eficacia de nuestros servicios, y es lo que pretendemos hacer con este plan que por fin se va a poder desarrollar después de muchos esfuerzos que no habían fructificado». Entre las medidas que la institución implantará en los próximos meses destaca la revisión de todos los procesos administrativos para reducir los plazos; y la sustitución de autorizaciones por declaraciones responsables y comunicaciones previas. Estas medidas de simplificación administrativa se completarán con la simplificación normativa, que consistirá en revisar el conjunto de ordenanzas, reglamento y normativa interna con la finalidad de derogar o refundir todo lo que sea posible. Una comisión integrada por los jefes de servicio de Asesoría Jurídica y Presidencia y el coordinador de la Secretaría General se encargará de establecer los objetivos específicos, los criterios de simplificación y la protección de la calidad normativa. El plazo inicial para poner en marcha el plan se fija entre el presente año y 2026 , período en el cual se llevarán a cabo evaluaciones anuales para pulir un texto que se publicará en el portal de Transparencia de la Diputación. El presidente ha destacado la iniciativa porque «define la forma de gestionar y entender la institución que tenemos, con ideas que tratan de facilitar las cosas a quienes trabajan con la Diputación, sin perdernos en grandes anuncios que luego no llegan a concretarse en actuaciones reales». En opinión de Mompó, «la filosofía que vemos en el plan con la eliminación de burocracia es la que encontramos, por ejemplo, en el Pla Obert d'Inversions que coordina la vicepresidenta Natàlia Enguix, o en el área de Infraestructuras que dirige la vicepresidenta Mazzolari, donde la prioridad es ayudar a los ayuntamientos a que puedan ejecutar los proyectos y que el dinero que reciben de la Diputación se traduzca en una mejora de la calidad de vida para sus vecinas y vecinos». El Plan de Simplificación Administrativa de la Diputació de València busca ofrecer un marco normativo eficiente que se adapte a las demandas de la sociedad actual, garantizando la calidad, simplicidad y efectividad de las normas, así como la accesibilidad para la ciudadanía. En este sentido, la Unión Europea ha puesto en marcha distintas iniciativas desde 1995, con la firme intención de reducir las cargas administrativas y económicas. También la legislación estatal ha introducido estos principios en leyes aprobadas en 2011 y 2015, imponiendo la obligación de evaluar periódicamente la normativa en vigor. En la misma línea ha trabajado la Generalitat Valenciana, con planes que promueven la simplificación administrativa como el SIRCA y el SIRCA-2 y un decreto-ley de julio de este mismo año, que entre otros asuntos presta especial atención a la eliminación de barreras y trabas innecesarias que puedan afectar a la ciudadanía y las empresas. El capítulo noveno del decreto autonómico se dedica a la simplificación administrativa en los entes locales, a los que se insta a aprobar normativas para hacer más eficientes sus procedimientos y trámites. La Diputación, que tiene competencias reglamentarias y de autoorganización, no disponía hasta la fecha de un plan específico de simplificación.
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