El municipio orensano de O Irixo vivió este lunes uno de esos episodios surrealistas sacados de una novela negra, que, afortunadamente, se quedó en una anécdota. La protagonista, una granada localizada en una casa deshabitada , con carga explosiva y aún con su espoleta, que obligó a movilizar al equipo de desactivación de explosivos de la Guardia Civil de Pontevedra. Según informó Ep, el artefacto fue identificado por trabajadores de la mancomunidad de O Carballiño, que alertaron a la Guardia Civil para que se desplazasen al lugar, como indicaron fuentes de la propia Benemérita. Hasta la casa, que se encuentra deshabitada, se movilizaron efectivos del grupo d e desactivación de explosivos de la Guardia Civil de Pontevedra , que procedieron a la retirada del artefacto, una granada de mano defensiva tipo piña que conservaba la carga explosiva y la espoleta para su detonación.
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