El cantante Manu Tenorio (49 años) se encuentra en el ojo del huracán en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, debido a una polémica disputa con los inquilinos de su chalet. La controversia, que ya ha captado la atención de medios y vecinos por igual, ha tomado un giro inesperado con las declaraciones de los residentes de la urbanización, quienes parecen estar más a favor de los presuntos 'inquiokupas' que del propio artista. La batalla legal comenzó cuando Tenorio, conocido por su participación en Operación Triunfo, denunció públicamente a los inquilinos por impago del alquiler y los calificó de 'okupas'. Según el cantante, llevan más de un año sin pagar el alquiler de la vivienda y se han negado a abandonarla, lo que ha generado una deuda superior a los 10.000 euros . Sin embargo, los inquilinos se defienden, argumentando que han recibido cartas de Hacienda que les ordenan no pagarle a Tenorio debido a una supuesta «deuda millonaria» que él tendría con el Fisco. Lo que ha sorprendido a muchos es la postura de los vecinos de la urbanización. A pesar de la gravedad de las acusaciones, varios residentes han salido en defensa de la familia que habita el chalet, afirmando que no se trata de okupas, sino de personas que cumplen con su contrato de alquiler. « Son gente trabajadora , no dan problemas en el barrio. Es más, han enseñado el contrato, y no tienen nada que esconder«, asegura una vecina que prefirió no revelar su identidad. Por otro lado, algunos de los vecinos no han dudado en criticar al cantante, acusándolo de no haber pagado las cuotas de la comunidad desde hace tiempo. «Tenorio nunca ha pagado lo que le corresponde a la comunidad, así que no es justo que ahora trate de hacer quedar mal a esta familia«, comentó otra residente del lugar, añadiendo más leña al fuego en esta ya complicada situación. El caso ha generado un intenso debate en el municipio gaditano. Mientras que Tenorio insiste en que la familia debe abandonar la vivienda por incumplimiento del contrato, los inquilinos mantienen su posición firme, negándose a irse y defendiendo su derecho a permanecer allí. Hasta el momento, ni el cantante ni los supuestos 'inquiokupas' han querido hacer más declaraciones públicas. Sin embargo, el conflicto parece lejos de resolverse, y con los vecinos divididos, todo apunta a que esta controversia seguirá generando titulares por un buen tiempo.
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