El lugar elegido por el escritor extremeño, Luis Landero (Alburquerque, 1948), para presentar 'La última función' ha contado con el mejor marco posible de Toledo. Se trata del Salón Rico, que se ha quedado pequeño para acoger a los cientos de lectores y seguidores de su literatura, quienes no han querido perderse el encuentro con este autor y disfrutar del proceso de creación de este libro. Gracias al Festival del Cine y la Palabra, CiBRA se ha vuelto a fusionar el cine y la literatura, en este encuentro con el autor de 'Caballeros de fortuna' y el 'Mágico aprendiz' y Premio Nacional de las Letras 2022 , que ha confesado que en su juventud, él quería ser guitarrista, «pero la vida me llevó por otros derroteros y aquí estoy presentando mi libro«, rememoraba entre risas al público asistente. Centrado en la presentación de su novela, 'La última función', Landero ha explicado que en el libro cuenta la historia de Tito Gil y Paula , unidos en una huida hacia adelante de sus vidas con la puesta en marcha de una obra de teatro en un pueblo que podría formar parte de lo que se conoce como la 'España vaciada'. En este sentido, ha remarcado que pese al trasfondo de ese mundo rural, considera que su novela es un canto al teatro. Del mismo modo, a través de la novela, el escritor ha reconocido que se ha planteado preguntas cómo si una obra teatral puede cambiar la vida de quienes la representan y ha considerado que el arte redime a sus personajes y los cambia, sacando lo mejor de cada uno. «El personaje de Paula siente que ha fracasado en todos los aspectos de su vida. Sin embargo, la mejor manera de conocerse a uno mismo es proyectándose hacia fuera, mejor que hacia dentro, por lo que ella usa el teatro a modo de reflejo. Siendo otra persona, a través de otro personaje consigue verse poco a poco ella misma», ha remarcado el también articulista. En esta línea, ha apuntado que no hay personajes ni buenos ni malos, y que en todo caso estos últimos se pueden redimir. «No es que tenga preferencia por escribir uno u otro, lo hago conforme la historia me lo vaya pidiendo. Creo que el mejor personaje que ha sabido redimirse en toda la historia ha sido Don Quijote. Él fracasa en todas sus aventuras, pero se levanta y sigue luchando, fiel a sus convenciones, ha subrayado. Y ha incidido en que las personas que fracasan son aquellas que no lo intentan. «No voy a decir que todos los personajes son luminosos, porque no lo son, pero es que la vida no es un folletín, no es luminosa», ha puntualizado.
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