La primera edición de la Joven Copa América en 2013 tuvo como protagonistas de excepción a los neozelandeses Peter Burling, de 22 años, y Blair Tuke, de 24, hoy campeones olímpicos, seis veces campeones del mundo de la clase 49er. y vencedores con el Team New Zealand de aquella edición. En 2017 en Bermudas, los ingleses Rob Bunce (con 19 años) y Neil Hunter (18) fueron los protagonistas de la segunda edición La victoria ganando al Team New Zealand en a final. El pasado jueves, el equipo italiano Luna Rossa en la Joven Copa del América tuvo un nombre propio: la de Marco Gradoni, de 20 años y timonel principal del AC40 transalpino, que se convirtió en la nueva 'estrella' de la Copa América al lidera a su equipo a la victoria en la final de la Joven Copa frente al American Magic estadonuidense Mientras los equipos absolutos del Luna Rossa y el INEOS Britannia se preparaban, el mismo día, para, horas después iniciar la final de la Copa Louis Vuitton o -Torneo de Desafiantes-, al mediodía se disputaba la final de la Joven Copa del América (tripulaciones masculinas o mixtas menores de 26 años). Las cadenas italianas de televisión transmitíeron en directo esa final con la tripulación italiana formada por Marco Gradoni (20 años) , Gianluigi Ugolini (25) , Federico Colaninno (25) y Rocco Falcone (23), todos con títulos mundiales y europeos de su edad, realizaba una carrera sensacional en 'match-race' (barco contra barco) frente al American Magic, liderado por la 'estrella' estadounidense Harry Melges IV, de 23 años, al que superaban por 36« en un recorrido de 20'11». Solo cruzar la línea de meta, no pudo ocultar su emoción por la victoria porque, «trabajamos muy duro para llegar aquí nos preparamos intensamente preparando esta final. Quiero agradecer a mis compañeros de la tripulación el trabajo extraordinario que han realizado. También el apoyo recibido de todo el equipo Luna Rossa Prada Pirelli, incluido el equipo femenino, que nos ayudó a lograr este gran resultado». Y el propio Patrizio Bertelli , presidente de Luna Rossa Prada Pirelli, señaló en declaraciones a los medios del equipo,: Los chicos han realizado una carrera perfecta y una ejecución perfecta. Enhorabuena a todos«. «Vuestra victoria demuestra que el programa Nueva Generación que lanzamos al principio de la última campaña de la Copa del América ha dado sus frutos. Estoy muy orgulloso de vosotros. Ahora, sigamos adelante», concluyo. Todo apuntaba a que iba a ser pieza importante en el equipo olímpico italiano de la clase 470 mixta en los JJ.OO. de París 2024, pero el 14 de marzo de 2022, el mismo día que cumplía 18 años, llegó una llamada telefónica de Max Sirena, patrón y director deportivo del Luna Rossa, para que realizase una prueba para incorporarse al equipo. El joven timonel recordó: «No me lo esperaba y menos el día de mi cumpleaños. Sabia que Luna Rossa tenía interés en mí, pero pensar que estaría en la Copa era como cumplir un sueño que tenía desde hacía algún tiempo y me sentí muy feliz de ser parte del equipo de mi país» . Su nombre saltó a las primeras páginas de los medios deportivos cuando el pasado 2 de diciembre, en la final de la segunda regata preliminar de la Copa del América en Jeddah (Arabia Saudí), el Luna Rossa, con el doble campeón olímpico de la clase Nacra17, Ruggero Tita (31 años)y Marco Gradoni (entonces aún 19)como timoneles y con Vittorio Bissaro y Umberto Molineris como trimmers, le plantaba cara al Emirates Team New Zealans con Peter Burling, Nathan Outteridge, Blair Tuke y Andy Maloney, aunque la victoria fue para los neozelandeses. El paso siguiente para Gradoni fue seguir los entrenamientos con el simulador del equipo en la base del Luna Rossa en Cagliari (Cerdeña), y en mayo de este año, ya en Barcelona, preparando y ya navegando con el LEQ12 (monocasco de entrenamiento) y con el AC40, su posible participación en la Joven Copa América, e incluso en el equipo absoluto. Su primera decisión importante fue renunciar a ir a los Juegos Olímpicos de París para irse a la aventura de la Copa América. Él lo meditó porque, «primeramente, intenté hacer las dos cosas. Era muy complicado, tanto a nivel físico como mental, pero me dije: «haz una cosa bien en lugar de dos malas. Me decanté por ir a la Copa porque era algo que me atraía y para mí es aquí donde está el futuro de la vela. Hoy creo que fue una decisión acertada y no renuncio a seguir en la competición olímpica en absoluto en un futuro» . Su nombre saltó a las primeras páginas de los medios deportivos cuando el pasado 2 de diciembre, en la final segunda regata preliminar de la Copa América, el Luna Rossa, con el doble campeón olímpico de la clase Nacra17, Ruggero Tita (31 años)y Marco Gradoni (entonces aún 19)como timoneles y con Vittorio Bissaro y Umberto Molineris como trimmers, le plantaba cara al Emirates Team New Zealans con Peter Burling, Nathan Outteridge, Blair Tuke y Andy Maloney, aunque la victoria fue para los neozelandeses. El paso siguiente para Gradoni fue seguir los entrenamientos con el simulador del equipo en la base del Luna Rossa en Cagliari (Cerdeña), preparando ya navegando con el AC40 su posible participacion en la Joven Copa América, e incluso en el equipo absoluto. Su primera decisión clave fue renunciar a ir a los Juegos Olímpicos de París para irse a la Copa América. Él lo meditó porque, «primeramente, intenté hacer las dos cosas. Era muy complicado, tanto a nivel físico como mental, pero me dije: »haz una cosa bien en lugar de dos malas. Me decanté por ir a la Copa porque era algo que me atraía y para mí es aquí donde está el futuro de la vela. Hoy creo que fue una decisión acertada y no renuncio a seguir en la competición olímpica en absoluto en un futuro« . El dominio italiano en esta edicion de la Joven Copa América ha sido absoluto. En trece mangas frente a doce equipos venció en 9, fue segundo en dos, tercero en una y solo falló con un sexto puesto en una. Cuando llegó a esta Copa del América, Marco Gradoni ya no era un desconocido en la vela. Nacido en Roma ya destacó al convertirse en el primer regatista de la clase Optimist de la historia en ganar tres títulos mundiales consecutivos (2017, 2018 y 2019). En 2019, con 15 años, fue nombrado Mejor Regatista Mundial del Año, el más joven de la historia en recibirlo. En 2020 empezó a competir en la clase 29er. y al año siguiente se pasó a la clase olímpica 470 Mixta como patrón junto a Alessandra Dubbini, ganando inmediatamente el campeonato de Europa y el mundial juvenil de 2021. En cuanto a esta Copa América, reconoció: « Esto ha sido un cambio en mi rutina de vida, pero el trabajo es el mismo: salir al agua, competir e intentar ganar. La verdad es tanto el AC75 como el AC40 que son barcos diferentes con los que competía antes, pero también similares en muchos conceptos» . Max Sirena, el director deportivo del Luna Rossa Prada Pirelli es su gran valedor, pero también era consciente que Gradoni debía tener los pies en el suelo. Quizás fue una sorpresa para muchos medios cuando, el pasado 14 de agosto, Sirena daba la lista de los 18 integrantes del equipo absoluto que iba a competir con el AC75 en la tercera regata preliminar y la Copa Louis Vuitton en la 37ª Copa América. En la lista de timoneles además de los titulares Francesco Bruniu yel eustraliano Jimmy Spithill estaba Ruggero Tita, pero no Gradoni, que se anunciaba que sería el primer timonel del equipo Joven. Él mismo indicó entonces: «no sabíamos quienes iban a estar en cada equipo (joven y absoluto) y en cada puesto. Yo me limité a entrar en la rotación con Francesco Bruni en los entrenamientos, nada más». Max Sirena, con todo lo que estaba en juego, apostó por la experiencia de hombres como Bruni y Spithill como timoneles y Umberto Molineris y Andrea Tesei como trimmers. Tras la gran victoria de ayer, y muy emocionado, Gradoni reconocía: «Fue una semana hermosa, sabíamos que había barcos que podían ganarnos, navegamos mejor que los otros equipos y estamos muy contentos con la victoria. Es un momento fantástico» . Cuando se le pregunto que sentía al ser ya es famoso en Italia, indicó: «No me considero famoso en absoluto. Es cierto es que hicimos algunas regatas muy buenas y lo que noto en este momento es que he mejorado muchísimo en otros muchos aspectos y, sinceramente, hoy me siento más cerca de mis objetivos futuros que hace unos meses» . Es muy aficionado al fútbol y seguidor fanático de la AS Roma. En el Luna Rossa luce el dorsal 10 y explicó: «es en homenaje a mi ídolo, el capitán, Francesco Totti, quien estuvo más de 20 años en el equipo y a quien me gustaría conocer: espero que pronto».
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