El pasado lunes 28 de octubre, un día antes de que la riada arrasara la provincia de Valencia en la peor DANA del siglo XXI , la Universidad de Valencia (UV) comunicó a sus alumnos que las clases del martes 29 quedaban suspendidas por la previsión de fuertes lluvias. Una decisión que el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, consideró « exagerada » durante una conversación informal con patronal y sindicatos el mismo día, ya con la alerta roja decretada. Estas palabras tuvieron lugar el pasado martes 29 de octubre durante una reunión para tratar los próximos Presupuestos de la Generalitat, en la que estaba presente Mazón, la vicepresidenta Susana Camarero y la portavoz Ruth Merino, así como Salvador Navarro como presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV) e Ismael Sáez y Ana García como representantes de UGT y CCOO respectivamente. El encuentro comenzó a las 14 horas y terminó tan solo media hora después. El presidente, según testigos presenciales, se fue minutos antes pidiendo disculpas porque «tenía otro compromiso», que no era otro que una «comida de trabajo» en el restaurante El Ventorro con la periodista Maribel Vilaplana para ofrecerle la dirección de la radiotelevisión autonómica À Punt. Sin embargo, durante los 30 minutos que duró la reunión y las conversaciones previas, Mazón en ningún momento le trasladó a los agentes sociales y económicos el alcance de la situación de la DANA, a una hora en la que, conforme avanzó ABC, ya se habían producido más de 80 servicios por parte del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia por las fuertes lluvias, en especial en la comarca de la Ribera Alta y la zona de Utiel. Pese a que no informó de la emergencias a los actores presentes en la reunión entre Ejecutivo, patronal y sindicatos, sí que se refirió en un tono informal durante una conversación antes de empezar el encuentro a la decisión de la Universidad de Valencia de suspender las clases como medida preventiva a las fuertes lluvias el día de antes, la cual calificó concretamente de «exagerada» , según ha adelantado elDiario y ha podido confirmar este periódico a través de algunos testigos. En este caso, la UV canceló toda su actividad docente el lunes 28 de octubre . En un primer mensaje, enviado a las 14.11 horas, avisaba de que la no asistencia a actividades con control de asistencia, incluidos exámenes, no afectaría al rendimiento académico si el desplazamiento a los campus estaba justificadamente impedido. Seis horas después, a las 20.45 horas del lunes, un día antes de la DANA, emitió otra comunicación oficial para suspender todas las actividades docentes en los campus tras decretarse el nivel de emergencia 2 por climatología adversa. Algo que replicó el martes a las nueve de la mañana pero que amplió sólo dos horas después. A las 11.41 del martes 29 de octubre, la fatídica fecha, aumentaba el nivel de emergencias a 3 por riesgo alto, incluyendo la suspensión de toda actividad como administrativa, investigadora y cultural, además de docente, el cual prorrogó hasta el domingo 3 y, desde entonces, han establecido medidas de flexibilidad y atención para personas afectadas por la riada. De hecho, hasta el próximo 5 de diciembre la actividad se ha adaptado a la modalidad online y los exámenes presenciales se retomarán a partir del 9 del mismo mes.
abc.es