Jon Rahm se ha convertido en el rey Midas del golf. Allá por donde va obtiene grandes réditos económicos. Tras levantar el trofeo de campeón del LIV Golf la pasada semana, el de Barrika se embolsó cerca de 20 millones de euros. Un triunfo que le permite cerrar una temporada agridulce en lo deportivo tras la decepción en los Juegos Olímpicos, pero que le ha reportado importantes premios económicos y le mantiene como el motor mediático actual de toda la industria en España.
Pese al polémico cambio de circuito, que le permitirá embolsarse 525 millones de dólares (471 millones de euros) durante los próximos cuatro años, su tirón se mantiene intacto. Y el golf español ha sabido aprovechar el tirón de Rahm hasta convertirse en uno de los deportes más importantes para dinamizar la economía española. El negocio del green movió más de 15.937 millones de euros en 2022 en el país, según las conclusiones del II Estudio sobre el Impacto Económico del Golf en España. Este importe hace referencia a los ingresos directos, indirectos e inducidos, así como la producción total generada por los campos de golf y el gasto de los turistas.
*Artículo publicado originalmente en 2Playbook.com
Este último factor es uno de los más importantes. El turismo ligado el golf se incrementó un 17% con respecto al 2018 y 1,4 millones de turistas llegaron al país para practicar este deporte en 2022, lo que le sitúa como líder europeo, según el estudio desarrollado por IE University y que acaban de presentar la Real Federación Española de Golf (Rfeg) y la Asociación Española de Campos de Golf (Aecg).
Los visitantes vienen a España atraídos por sus campos de golf, pero hasta 8,9 de cada 10 euros que se gastan van a parar a otros sectores. “El golf en España tiene un impacto mucho mayor en sectores complementarios, especialmente gracias a su liderazgo en el turismo de golf en Europa”, señala el catedrático de dirección estratégica del IE, Juan Santaló, encargado de dirigir el estudio.
Además, hasta 382.7555 viviendas en España eran propiedad de turistas de golf en 2023, con un valor total de 82.342 millones de euros, lo que demuestra el poder adquisitivo y la fidelidad de un perfil de visitante que tiene un alto impacto en actividades como el inmobiliario o la restauración. El aficionado internacional que viaja a España disfruta de 11,9 días de estancia, por los 7,5 días que dedica un turista común.
Sólo el turismo de golf dejó 14.512 millones de euros en la economía española. (EFE/Sergio Pérez)Sólo el turismo de golf dejó 14.512 millones de euros en la economía española. El gasto directo de los turistas se cifró en 5.872 millones de euros en 2022, un 27,6% más que en 2019. Ello se traslada al mercado laboral, pues el estudio sostiene que el golf y sus actividades asociadas generaron hasta 132.994 empleos en 2022, lo que significa un 9,6% más que en 2019.
Además, el trabajo que ofrece la industria del golf y los sectores adyacentes es muy saludable y estable: el 93,4% son contratos indefinidos y el 94,7% son contratos a jornada completa. Todo ello impacta directamente en la desestacionalización del turismo y la dinamización de la actividad económica, ya que la temporada alta del golf se desarrolla en los meses de primavera y otoño.
Los datos del estudio también apuntan que el nivel de renta del turista de golf es significativamente más alto que el del turista promedio. Hasta el 29,9% de los turistas de golf se declaran de renta alta, por un 9,43% del turista promedio. De este modo, el 61% del turismo de golf se identifica de renta alta y media-alta, por sólo un tercio de los turistas promedio.
Los campos de golf se acercan a la rentabilidad
La facturación total de los campos de golf españoles se cifró en 875 millones de euros en 2022. Alrededor del 58% se obtuvo con la venta de green fees (salidas al campo de un jugador) y de las cuotas de los socios. La media de ingresos por campo de golf es de 2,2 millones de euros y las previsiones apuntan que en 2023 se habrán alcanzado unos ingresos totales de 925 millones de euros. En este sentido, el estudio remarca que el precio medio de una partida ha subido un 10%, hasta los 71 euros, por debajo de la inflación acumulada que se situaba en el 14%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La media de ingresos de los campos de golf españoles es de 2,2 millones de euros
Una de las grandes tareas pendientes del sector es la rentabilidad. De hecho, sólo el 47% de los campos de golf de España terminaban el ejercicio en positivo antes de la pandemia. En los últimos años, la situación ha mejorado y ya en 2022 el 60% de los campos fueron rentables, y las previsiones apuntan a que dos tercios de los campos terminaron el ejercicio 2023 en positivo.
Gonzaga Escauriaza, presidente de la Rfeg, señala que “el golf ha pasado de ser visto como un simple complemento turístico a convertirse en un motor económico clave para nuestro país”. Por su parte, Luis Nigorra, presidente de la Aecg, añade que “los datos demuestran que el golf no sólo es un deporte, sino un catalizador económico y social. Desde la primera edición del estudio en 2019, hemos visto cómo el golf ha cambiado la percepción pública, siendo reconocido por su doble naturaleza deportiva y turística y considerado por la Administración como generador de riqueza”.
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