Ingenieros de la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnología de Seúl (Corea) han creado un carrito volador para transportar cargas sin esfuerzo por todo tipo de terrenos. El aparato se llama Palletrone y se trata, como su propio nombre indica, de la unión entre un palé y un dron. Por ahora, el Palletrone es un prototipo con una potencia limitada, pero es una muestra de cómo podría ser el transporte de cargas pesadas en el futuro.
“La plataforma está diseñada con una amplia superficie plana superior para facilitar la carga, complementada con un asa montada en la parte trasera que recuerda a un carrito de la compra”, aseguran los investigadores en un artículo publicado en la revista IEEE Robotics And Automation Letters. “El control de la trayectoria de vuelo se consigue mediante un operador humano que agarra el asa y aplica fuerzas y pares tridimensionales mientras mantiene un transporte de carga estable con un balanceo y cabeceo cero durante todo el vuelo”.
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Cómo funciona
El Palletrone es básicamente un dron con una superficie plana arriba y varios motores de hélices en su parte inferior que pueden girarse para generar empuje en cualquier dirección. El sistema está controlado por un algoritmo de inteligencia artificial llamado Disturbance Observer Robust Control Algorithm que envía órdenes precisas a la Unidad de Medición Inercial (IMU en sus siglas en inglés) del aparato para mantener la estructura totalmente horizontal y permitir que la plataforma pueda llevar la carga de manera estable y segura.
“Para facilitar la interacción física entre humanos y robots, empleamos una técnica de control de admitancia. En lugar de basarnos en complejos métodos de estimación de la fuerza, como en la mayoría de las implementaciones de control de admitancia, introducimos una técnica de estimación sencilla pero eficaz basada en un algoritmo”, escribe el equipo.
Una vez cargado, el carrito volador se lleva como uno normal: se agarra por las asas y se empuja en la dirección deseada. Su IMU responderá al más mínimo contacto y estimará las trayectorias necesarias para mantener la estabilidad total del Palletrone.
Esto, dicen sus creadores, es especialmente complicado, ya que el sistema tiene que ser capaz de diferenciar entre la fuerza ejercida por la carga y la que ejerce el humano. Si la IMU detecta una fuerza que mueve el dron hacia abajo, podría ser cualquiera de las dos, pero el algoritmo soluciona este problema de manera sencilla, asegura el equipo.
Necesita mejorar
El actual prototipo del Palletrone es interesante, pero solo es la primera muestra de lo que puede llegar a ser un futuro carrito volante disponible comercialmente. Por ahora es capaz de mantener la estabilidad sin problemas, pero tiene varias limitaciones.
Las pruebas realizadas por los investigadores se hicieron con un peso de algo menos de 3 kilos de carga. Sus motores tienen una potencia suficiente para volar con la compra diaria de un soltero, pero están lejos de poder cargar con la de una familia. También hay dudas sobre el ruido que provoca el movimiento de las hélices y la duración de la batería, que en los drones suele ser bastante corta (entre 15 y 30 min, aunque hay modelos duran más dependiendo de la carga). Aunque el equipo asegura estar trabajando en un sistema de acoplamiento que permite a un Palletrone cambiar la batería de otra unidad en vuelo
Los investigadores también ven otros usos para este aparato, aparte de como carrito o plataforma logística para uso industrial. "Conectando una cámara a la plataforma, podría servir como trípode volador o incluso como plataforma móvil, permitiendo movimientos y ángulos de cámara flexibles", explican en declaraciones para Spectrum IEEE. "Esto sería especialmente útil en entornos en los que es difícil conseguir equipos de filmación especializados".
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