La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU ha disparado el optimismo de los inversores sobre el ritmo de crecimiento económico, pero ha avivado el temor a un repunte de la inflación, según la última encuesta de gestores de fondos de Bank of America.
Después del triunfo de Trump, la diferencia entre los gestores que esperan una economía más fuerte en los próximos doce meses y los que no contemplan esa posibilidad se ha elevado hasta el 23% a favor de los primeros, el porcentaje más alto desde agosto de 2021.
El porcentaje de gestores que prevén un aterrizaje suave de la economía baja desde el 76% al 55%, mientras que sube la proporción de quienes creen que la economía no llegará "a aterrizar" y se mantendrá sólida (del 14 % al 33 %).
Tras la elección de Trump, son más los gestores que esperan un repunte de la inflación (el nivel más alto desde julio de 2021) y menos los que confían en el recorte de los tipos de interés (el nivel más bajo desde octubre de 2023).
De hecho, la posible aceleración de la inflación vuelve a ser el principal riesgo para los gestores de fondos, seguida por los conflictos geopolíticos.
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