Sevilla viaja 'del miedo al paraíso' con Mikel Izal

Después de que María José Llergo inaugurara anoche el Festival del Patio por todo lo alto, cientos de personas han vuelto a reunirse en el corazón del edificio de la Diputación de Sevilla para disfrutar de la música en directo. Esta vez, de la mano de Mikel Izal. Entre el público, una amplia variedad de edades : jóvenes, adultos, mayores… Incluso algún que otro niño acompañando a sus padres. Sin duda, nadie quiso perderse la actuación del pamplonés. A las 21 horas en punto -ni un minuto más, ni uno menos-, todo se apagó, dando paso a unas luces rojas que parpadeaban sobre el escenario. La entrada de la banda desató los gritos de Sevilla, cuyos decibelios aumentaron significativamente cuando el protagonista abandonó el 'backstage'. «Capítulo uno: el miedo» , anunciaba una voz femenina introduciendo el tema. 'El miedo y el paraíso' es el último álbum que Mikel Izal ha publicado y el primero de lo que él denomina una «nueva etapa». El camino no es fácil, pero a veces es necesario tocar fondo para reinventarse. Tras pasar por un proceso de descubrimiento y evolución personal, el artista ha consolidado su experiencia en un disco. Los acordes finales de 'El miedo' se transformaron en los de 'La gula', y todos, incluso los que estaban sentados en la grada, terminaron bailando. «Qué placer tocar en un sitio tan íntimo. Hacía bastante que no disfrutaba de un ambiente así », afirmaba Mikel al terminar la canción. Al poco tiempo, añadió: «Si tenéis algo dentro, sacadlo. Hablad con un amigo, un familiar, un psicoterapeuta… ¡Pero gritadlo!». Empezaba el «Capítulo 2: El Grito» . Comparando la vida misma con un laberinto y destacando sus recovecos o la incertidumbre que provocan, el pamplonés recordaba a los asistentes que, aunque pueden venir «tiempos de mierda», «está a punto de pasar algo que puede cambiar tu vida. Así que nunca, nunca, pierdas la fe». El tercer capítulo, 'La fe' había llegado. A lo largo de la noche, el protagonista rindió homenaje a sus inicios , cuando era vocalista y compositor del grupo de pop rock independiente IZAL, interpretando temas como 'La increíble historia del hombre que podía volar pero no sabía cómo', 'Inercia' o 'El baile', un tema lleno de energía que sirvió para cerrar -o eso parecía- el 'show'. «Llegamos al destino de este viaje..» y, como no podía ser de otra manera, el 'Capítulo 4: El Paraíso' , puso el broche de oro a la noche. Es evidente que el artista pone el corazón en cada una de sus letras, tan solo hay que parar y escuchar. Hablar sobre dolor y heridas recientes o pasadas no siempre es fácil, por mucho tiempo que haya pasado. Mucho menos, hacerlo público sacando un disco y organizando una gira. Lo que Mikel Izal ha hecho en el patio de la Diputación es un acto de valentía , y los asistentes lo premiaron con una gran ovación final. Como si alguien lo hubiera planeado, minutos antes del espectáculo una lluvia fina caía del cielo. A medida que Mikel recorría cada fase de su proceso, fue dejando de llover. Es curioso como unas simples gotas de agua terminaron convirtiéndose en el paralelismo perfecto, porque, si hay algo que Mikel ha demostrado esta noche -además de que tiene un talento innegable-, es que después de la lluvia siempre llega la calma. Para Sevilla, este concierto se vivió como una sesión de terapia .

abc.es

Leer artículo completo sobre: abc.es

Noticias no leídas