Una estadounidense reflexiona sobre la solidaridad de los españoles en la DANA y por qué esto no ocurriría en su paísUnos padres destacan lo que echan de menos de la educación estadounidense y que no han encontrado en España
Rylie Booth, una profesora estadounidense de inglés que recientemente se ha mudado a España, ha compartido en redes sociales su sorpresa ante las diferencias culturales que ha encontrado durante sus primeros días en el país. En un video publicado en TikTok, la joven relata las curiosas y llamativas experiencias que ha vivido en tan solo cinco días desde su llegada, destacando especialmente la libertad de los adolescentes y las diferencias horarias que han sido todo un reto para ella.
Para Booth, los horarios de las comidas han sido una de las mayores sorpresas. “Quiero decir, sus horarios no están distorsionados para ellos, pero para mí simplemente se siente tan al revés”, comenta, refiriéndose a la hora de la comida y la cena. En su relato, se asombra de que la cena sea algo habitual a las 9 o incluso las 10 de la noche, lo cual sería impensable en muchas zonas de Estados Unidos.
Las cosas que más le volaron la cabeza a esta española viviendo en Estados Unidos: "Zumo y agua"ACyV
La profesora también destaca el nivel de estilo a la hora de vestir, especialmente entre las mujeres, quienes, según explica, suelen llevar tacones altos a diario. “Sabía que España se vestía bien, un poco más que en el resto de Europa, y mucho más que California o EE.UU.”, añade.
Otro aspecto que ha llamado profundamente la atención de Rylie es la “libertad total” que parece disfrutar la juventud española. La estadounidense ha contado que se ha encontrado adolescentes por la calle de noche muy arreglados para salir de fiesta.
@ryryboom Things i have noticed in Spain that would send Americans into a coma😅🪭 #cultureshock #americaninspain #americanabroad #nalcap #spain ♬ original sound - rylie booth“Hay chicos de 12 a 16 años caminando por ahí. Y van mucho mejor vestidos que yo. Parece como si fueran a salir a la discoteca y son como las diez de la noche, once de la noche”, comenta. Esta independencia y las actividades nocturnas de los adolescentes reflejan una confianza y autonomía a las que no está acostumbrada en su país de origen, donde la supervisión parental suele ser más estricta.
Además, aprecia el horario escolar español, que difiere bastante del modelo estadounidense. En su lugar de trabajo, las clases comienzan a las 9 de la mañana y terminan a las 2 de la tarde, una jornada laboral que, para ella, resulta “fenomenal”. Con la intención de documentar estas experiencias, Booth promete seguir compartiendo sus vivencias en redes sociales, capturando cada detalle de su adaptación a la vida en España.
elconfidencial.com