Utiliza la regla 10-90 en una entrevista de trabajo si te preguntan por tus debilidades

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Las entrevistas de trabajo pueden ser momentos de gran tensión para los candidatos, especialmente cuando se enfrentan a preguntas que buscan revelar aspectos personales como las debilidades o áreas de mejora. Este tipo de interrogantes no solo generan nerviosismo, sino que también ponen a prueba la capacidad de autocrítica y de comunicación del candidato.

En concreto, responder a la temida pregunta sobre qué debilidades tenemos es un reto para muchos candidatos. Para lidiar con maestría a esta pregunta, la instagrammer Erin McGoff, experta en consejos laborales, comparte en un vídeo cómo debemos enfrentarnos a esta cuestión. Los entrevistadores no buscan conocer debilidades que afecten la capacidad profesional de los aspirantes, sino evaluar la autocrítica y la habilidad para enfrentar áreas de mejora. Para ello, la estrategia a aplicar es la llamada regla 10-90.

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Como explica Erin, la regla 10-90 consiste en estructurar la respuesta dedicando un 10% a mencionar la debilidad y el 90% restante a explicar cómo se trabaja para mejorar en ese aspecto. Según los especialistas, este método permite presentar una debilidad sin comprometer la imagen profesional, ya que la respuesta se centra en el progreso y en el aprendizaje. Esta técnica ayuda a evitar posibles señales de alerta para los reclutadores, quienes valoran la honestidad y el compromiso del candidato en su desarrollo profesional.

Cómo aplicar la regla 10-90 en las entrevistas

Al aplicar la regla 10-90, es importante elegir una debilidad real que no afecte directamente el desempeño en el puesto. La experta recomienda optar por aspectos menores o habilidades secundarias. Así, un candidato podría señalar su dificultad para delegar tareas, un aspecto que podría mejorar su productividad sin perjudicar su capacidad para cumplir con las responsabilidades del cargo.

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Para estructurar la respuesta, el candidato debe describir brevemente su debilidad y, de inmediato, detallar los pasos que está tomando para mejorar. Esto puede incluir, por ejemplo, la realización de un plan de acción personal o la práctica de ciertas habilidades. En esta técnica, la autocrítica y el enfoque en la mejora continua transmiten una imagen de compromiso y profesionalismo. En el ejemplo anterior, sobre la dificultad de delegar tareas, valdría responder que estamos trabajando en ello delegando una tarea a la semana.

La importancia de destacar el desarrollo profesional

Los expertos afirman que la clave de esta técnica está en el énfasis en el crecimiento profesional. Al hablar de la debilidad, como dificultades para escuchar a otros compañeros o la tendencia a depender del trabajo en equipo y no ser independiente, el candidato no solo muestra autoconciencia, sino que destaca su disposición para superar retos. La regla 10-90 permite que los entrevistadores perciban al aspirante como una persona enfocada en el aprendizaje y la superación, factores que pueden resultar determinantes para conseguir el puesto.

Utilizar la regla 10-90 en entrevistas no solo ayuda a mejorar la respuesta a una pregunta incómoda, sino que también proyecta una imagen de autocrítica constructiva. Con esta técnica, el candidato demuestra que está comprometido en su desarrollo profesional y en la mejora de sus habilidades, cualidades valoradas por los empleadores en el competitivo mercado laboral actual.

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