Moreno respeta la negociación del Estado por Gibraltar pero reclama que el pacto salvaguarde la "singularidad" del Campo
“Lealtad institucional” y aportación “constructiva”. Tras días recelando del acuerdo que ultiman España y el Reino Unido para el encaje de Gibraltar tras el Brexit, la postura oficial de la Junta de Andalucía ha sido la de rebajar una tensión que, sin ir más lejos, ha alimentado el PP esta misma semana en el Senado. “Nadie cuestiona al Estado”, ha señalado el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno (PP), que no obstante ha recordado que el Estatuto de Autonomía le da potestad para hacer oír “la voz de Andalucía” y transmitir que en ese pacto deben salvaguardarse los intereses de la comunidad autónoma y la “singularidad” del Campo de Gibraltar, reequilibrando el territorio.
Así lo ha transmitido tras una reunión mantenida con alcaldes de la zona, y después de que en las horas previas sobrevolase el temor de que el Gobierno andaluz (en sintonía con la postura del PP) intentase animarles a ralentizar una negociación que está en su recta final. De hecho, el Ministerio de Asuntos Exteriores quiere cerrarla antes de las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Finalmente, los tiros no han ido por ahí y se está a verlas venir de cara al encuentro que el lunes mantendrán el Ejecutivo autonómico y los regidores con el propio ministro, José Manuel Albares.
“La reunión ha sido para aportar y contribuir”, ha defendido Moreno, que no obstante ha soltado la puya de que carece de información oficial sobre la marcha de la negociación y que ha defendido el “derecho” del Gobierno andaluz a “hacerse oír” porque tiene muchas competencias que se verán afectadas. Pero todo ello en un tono formal de colaboración, lanzando un mensaje de “máxima lealtad institucional” y deseando a Exteriores “todo tipo de éxitos”. El objetivo final, ha señalado, es resolver “un problema enquistado desde hace demasiados años” y que se ha vuelto “insostenible” desde el Brexit.
“La quiebra o el despegue”
“El acuerdo puede significar o la quiebra o el despegue” para el Campo de Gibraltar, por lo que confía en que sirva para “erradicar” la actual brecha en la zona, que ha ejemplificado en la renta per cápita media: 90.000 euros anuales para un gibraltareño frente a los 11.000 de un ciudadano de La Línea de la Concepción. Una “diferencia de riqueza y prosperidad” que ha achacado a que el Peñón es “una colonia” que “genera una gravísima distorsión económica, social y fiscal”.
En un territorio en el que viven 300.000 andaluces, Gibraltar “compite con mejoras que son claramente injustas” y que se reflejan en detalles como que se cruza la verja para echar gasolina o comprar tabaco. De ahí que el pacto sea de una “importancia trascendental” para el Campo y para toda Andalucía, reconociendo eso sí que “no hay acuerdo fácil” en esta cuestión por la “capacidad sofisticada” de la Roca a la hora de negociar.
Si una parte de su intervención sin preguntas la ha dedicado Moreno a criticar las ventajas con las que se desempeña Gibraltar, otro bloque lo ha centrado en defender que el Campo es un entorno con un “enorme potencial y atractivo económico” del que nunca se trasmite la mejor de las imágenes. Por su músculo logístico, y con un puerto de Algeciras que es puerta de África e incluso de América, ha llegado a asegurar que es una de las comarcas andaluzas con “mayor valor añadido”. Eso sí, sin ocultar que sufre “problemas de seguridad, empleo e infraestructuras” que competen a todas las administraciones, por lo que ha reclamado “un sólido plan de inversiones en el territorio”.
Los recelos de PSOE e IU
En la reunión han estado presentes los alcaldes (o sus representantes) de Algeciras, La Línea, San Roque, Los Barrios, Tarifa y Castellar de la Frontera. Junto a ellos, han asistido el consejero de la Presidencia, la delegada del Gobierno de la Junta en Cádiz y la presidenta de la Mancomunidad del Campo de Gibraltar.
Hora antes de que se produjera este encuentro en San Telmo, el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, reclamaba a Moreno una posición “constructiva” y de “lealtad y cooperación” con el Gobierno central sobre Gibraltar. De paso, esperaba que fuese “positiva, constructiva y, sobre todo, de lealtad y cooperación institucional” una reunión que, a su juicio, se ha convocado porque al presidente andaluz le gusta “protagonizar la película”.
Donde no se fían mucho de las intenciones del Gobierno andaluz es en IU, cuyo coordinador andaluz, Toni Valero, le pedía a Moreno “dejar hacer bien al Ministerio de Exteriores” sobre Gibraltar, que es “el competente” y cuya labor “está dando frutos”. Esto supondría, subraya, que en este asunto deje de actuar “como elefante en cacharrería”.