Retos, renuncias y consejos para alcanzar el liderazgo humanista
Cómo viven la necesidad de mantener un liderazgo humanista en sus compañías sin bajar la guardia? ¿Qué renuncias han tenido que hacer para ser consecuentes con el propósito de las organizaciones que dirigen? ¿Qué retos tendrán que afrontar para mantener su compromiso con ese propósito? A estos interrogantes planteados por Álex Pallete, fundador y CSO de Picnic y miembro del comité asesor de Líderes con Propósito, respondieron los máximos responsables de Mapfre, Ikea, Mahou San Miguel y Salesforce, tras exponer ante el auditorio del I Foro Líderes con Propósito las iniciativas de sus compañías para impactar positivamente en la sociedad. «Siempre me ha encantado escuchar que el buen líder tiene cuatro H: humanismo, honestidad, humildad y sentido del humor», comenzó Elena Sanz, CEO de Mapfre. «El humanismo, en el día a día, tiene que ver con la empatía, con ponerse en el lugar del otro. Los líderes no podemos perder ni la capacidad de escuchar ni la empatía si queremos cuidar a nuestros clientes», dijo al recordar el incendio del edificio de Valencia que, en febrero, causó 10 víctimas mortales, 15 heridos y dejó sin hogar a 450 personas. Alberto Rodríguez Toquero, director general de Mahou San Miguel, también habló de empatía al recordar la situación de los hosteleros durante la pandemia. «Cuando comenzaron a abrir, nos dimos cuenta de que habían estado tres meses cerrados y no tenían ingresos para pagar la primera caja». La compañía destinó el equivalente a 75 millones de euros para que tuvieran sus productos al levantar las persianas de sus establecimientos, y ayudó con la compra de estufas para las terrazas. «El resultado de ese año fue muy malo, pero el no económico fue extraordinario y nos llena de orgullo«, aseguró. «Estos son un ejemplo de que en los tiempos difíciles es cuando florece el propósito», apuntó Álex Pallete, antes de preguntar sobre las renuncias a oportunidades de negocio que, en ocasiones, también plantea. «Nuestro propio modelo de negocio está basado en la renuncia. Si vemos que no podemos cumplir con las expectativas del cliente, preferimos no hacerlo, porque parte de tu éxito depende del éxito del cliente», contestó Enrique Polo de Lara, SVP y director general de Salesforce Iberia. A su juicio, «el propósito ayuda a crear un circulo virtuoso que atrae a más clientes, porque ven que otros tienen éxito». Nurettin Acar, CEO de Ikea, recalcó que «ser un líder es una gran responsabilidad» y señaló que es fundamental «desarrollar resiliencia, tener una luz hacia la que mirar y encontrar negocios, buenos negocios, con una visión humanista, pero no cualquier negocio», porque «cuando sé que influyo en la vida de las personas, hago aún más. Y es importante transmitir eso a los equipos». A su juicio, un líder debe preguntarse cómo puede crear un entorno en el que se pueda «escuchar para aprender; aprender para decidir; decidir para servir». Los retos que tienen que afrontar las compañías para mantener su propósito fue otro de los asuntos que se abordaron. Elena Sanz habló del uso de la tecnología y la Inteligencia Artificial, y aseguró que «todos renunciamos, porque nos guiamos por principios éticos importantes. Pero prefiero hablar de transformaciones y cambios. La IA nos puede ayudar a ser ágiles en determinados procesos, pero no vamos a renunciar al contacto personal porque es parte de nuestras señas de identidad». Alberto Rodríguez-Toquero aseguró que «el primer reto es encontrar el balance entre rentabilidad y propósito, que debemos tener siempre presente. Y dentro de las organizaciones es importantísima la comunicación, porque si el propósito es el último filtro para saber si una decisión es acertada o no, es fundamental que todo el mundo tenga claro que es la brújula que nos orienta». Para Enrique Polo de Lara, el reto es, además de pensar en el propósito, «seguir pensando en las personas cuando hay que tomar decisiones». El último tramo del debate se centró en las recomendaciones de estos líderes a los directivos de una empresa que se encuentre en proceso de encontrar su propósito y unirse a esta comunidad. La CEO de Mapfre apuntó la necesidad de que sea auténtico, «porque si no lo acompañas del ejemplo y la actitud, no merece la pena. Sólo si tu te riges por esos valores en todo lo que haces transmitirás lo que eres». El máximo responsable de Ikea se refirió a la «flexibilidad y la capacidad de aprender. Eso y tener un propósito te ayudará a encontrar una manera de guiar a la empresa. Que la flexibilidad entre en el proceso de toma de decisiones puede ayudar a afrontar cualquier desafío». El director general de Mahou San Miguel suscribió sus dos recomendaciones y añadió que es necesario «hacer un viaje en el tiempo y ponerse en distintas situaciones, buenas o terribles, para ver si ese propósito es verdad. Ese viaje de construcción es fundamental». Y el SVP y director general de Salesforce Iberia concluyó: «Intenta incorporarlo en tu modelo de negocio. Si lo entiende el cliente, el empleado y el ecositema, que no es sencillo, será sostenible y auténtico».
abc.es
Retos, renuncias y consejos para alcanzar el liderazgo humanista
Cómo viven la necesidad de mantener un liderazgo humanista en sus compañías sin bajar la guardia? ¿Qué renuncias han tenido que hacer para ser consecuentes con el propósito de las organizaciones que dirigen? ¿Qué retos tendrán que afrontar para mantener su compromiso con ese propósito? A estos interrogantes planteados por Álex Pallete, fundador y CSO de Picnic y miembro del comité asesor de Líderes con Propósito, respondieron los máximos responsables de Mapfre, Ikea, Mahou San Miguel y Salesforce, tras exponer ante el auditorio del I Foro Líderes con Propósito las iniciativas de sus compañías para impactar positivamente en la sociedad. «Siempre me ha encantado escuchar que el buen líder tiene cuatro H: humanismo, honestidad, humildad y sentido del humor», comenzó Elena Sanz, CEO de Mapfre. «El humanismo, en el día a día, tiene que ver con la empatía, con ponerse en el lugar del otro. Los líderes no podemos perder ni la capacidad de escuchar ni la empatía si queremos cuidar a nuestros clientes», dijo al recordar el incendio del edificio de Valencia que, en febrero, causó 10 víctimas mortales, 15 heridos y dejó sin hogar a 450 personas. Alberto Rodríguez Toquero, director general de Mahou San Miguel, también habló de empatía al recordar la situación de los hosteleros durante la pandemia. «Cuando comenzaron a abrir, nos dimos cuenta de que habían estado tres meses cerrados y no tenían ingresos para pagar la primera caja». La compañía destinó el equivalente a 75 millones de euros para que tuvieran sus productos al levantar las persianas de sus establecimientos, y ayudó con la compra de estufas para las terrazas. «El resultado de ese año fue muy malo, pero el no económico fue extraordinario y nos llena de orgullo«, aseguró. «Estos son un ejemplo de que en los tiempos difíciles es cuando florece el propósito», apuntó Álex Pallete, antes de preguntar sobre las renuncias a oportunidades de negocio que, en ocasiones, también plantea. «Nuestro propio modelo de negocio está basado en la renuncia. Si vemos que no podemos cumplir con las expectativas del cliente, preferimos no hacerlo, porque parte de tu éxito depende del éxito del cliente», contestó Enrique Polo de Lara, SVP y director general de Salesforce Iberia. A su juicio, «el propósito ayuda a crear un circulo virtuoso que atrae a más clientes, porque ven que otros tienen éxito». Nurettin Acar, CEO de Ikea, recalcó que «ser un líder es una gran responsabilidad» y señaló que es fundamental «desarrollar resiliencia, tener una luz hacia la que mirar y encontrar negocios, buenos negocios, con una visión humanista, pero no cualquier negocio», porque «cuando sé que influyo en la vida de las personas, hago aún más. Y es importante transmitir eso a los equipos». A su juicio, un líder debe preguntarse cómo puede crear un entorno en el que se pueda «escuchar para aprender; aprender para decidir; decidir para servir». Los retos que tienen que afrontar las compañías para mantener su propósito fue otro de los asuntos que se abordaron. Elena Sanz habló del uso de la tecnología y la Inteligencia Artificial, y aseguró que «todos renunciamos, porque nos guiamos por principios éticos importantes. Pero prefiero hablar de transformaciones y cambios. La IA nos puede ayudar a ser ágiles en determinados procesos, pero no vamos a renunciar al contacto personal porque es parte de nuestras señas de identidad». Alberto Rodríguez-Toquero aseguró que «el primer reto es encontrar el balance entre rentabilidad y propósito, que debemos tener siempre presente. Y dentro de las organizaciones es importantísima la comunicación, porque si el propósito es el último filtro para saber si una decisión es acertada o no, es fundamental que todo el mundo tenga claro que es la brújula que nos orienta». Para Enrique Polo de Lara, el reto es, además de pensar en el propósito, «seguir pensando en las personas cuando hay que tomar decisiones». El último tramo del debate se centró en las recomendaciones de estos líderes a los directivos de una empresa que se encuentre en proceso de encontrar su propósito y unirse a esta comunidad. La CEO de Mapfre apuntó la necesidad de que sea auténtico, «porque si no lo acompañas del ejemplo y la actitud, no merece la pena. Sólo si tu te riges por esos valores en todo lo que haces transmitirás lo que eres». El máximo responsable de Ikea se refirió a la «flexibilidad y la capacidad de aprender. Eso y tener un propósito te ayudará a encontrar una manera de guiar a la empresa. Que la flexibilidad entre en el proceso de toma de decisiones puede ayudar a afrontar cualquier desafío». El director general de Mahou San Miguel suscribió sus dos recomendaciones y añadió que es necesario «hacer un viaje en el tiempo y ponerse en distintas situaciones, buenas o terribles, para ver si ese propósito es verdad. Ese viaje de construcción es fundamental». Y el SVP y director general de Salesforce Iberia concluyó: «Intenta incorporarlo en tu modelo de negocio. Si lo entiende el cliente, el empleado y el ecositema, que no es sencillo, será sostenible y auténtico».