Una vecina marchenera de Torrent busca a sus dos nietos: «La fuerza del agua se los arrancó a mi hijo de los brazos»
Izan y Rubén, de 5 y 3 años, son los nietos de la marchenera Antonia María Matías y permanecen desaparecidos a causa de las lluvias torrenciales caídas en el pueblo valenciano de Torrent después del paso de la DANA . A las seis de la tarde, estaban en su casa con su padre, Víctor Matías, cuando la tromba de agua los sorprendió derrumbando el edificio. Según cuenta la abuela, « cayeron al barranco y la fuerza del agua se los arrancó de los brazos». No los han vuelto a ver y están preparados para lo peor «el agua arrastraba de todo, no han podido sobrevivir a esto». A Víctor también se lo arrastró la fuerza del agua. Ha contado a su familia que se agarró a la rama de un árbol y resistió hasta las cinco de la madrugada « sólo con la cabeza fuera », cuenta su madre. Y es ella la que pide ayuda para encontrar a sus nietos porque «hasta hoy no nos están ayudando a buscarlos, sólo mi hijo pequeño y unos amigos están desde primera hora intentando encontrarlos». Víctor está en el hospital por la infección de las heridas que le provocó el agua y todos los elementos que arrastraba. «Posiblemente lo tengan que volver a intervenir», dice Antonia María. Y también está segura de que va a necesitar de tratamiento psicológico o psiquiátrico . «Está desconsolado , le han llevado dos toallas de playas de mis niños y está agarrado a ellas». Pero Antonia María, de 72 años, insiste en contar todo desde primera hora para dejar claro cómo ha sido la tragedia vivida. Estuvo con sus nietos hasta poco antes de la hora fatídica, «no dieron la alerta hasta dos horas después de pasar todo, pero sí dijeron que iba a llover y le dije a mi hijo que no los llevara al colegio, estuvieron todo el día conmigo». Pero Víctor, viendo como se ponía la tarde, salió antes de trabajar para llevarlos a casa. « Fue la última vez que los vi », cuenta la abuela. Una vez que el hijo llegó a su casa con los pequeños, Antonia María cuenta que «su padre les estaba haciendo la cena cuando el techo y las paredes se derrumbaron. Justo a lado de su casa hay una parada de camiones, los camiones rompieron la pared por la fuerza del agua». Así se lo ha contado a ella una vez rescatado. «Un vecino dio el aviso de que mi hijo estaba en el árbol y, después de rescatarlo , le hicieron una cura de emergencia y lo llevaron al pabellón. Mientras, mi otro hijo, mi nuera y yo estábamos sentados en el sofá sin saber qué hacer. Mi nuera intentó ir a su casa pero ya no podía», cuenta con la voz muy afectada por el sufrimiento de los últimos días. Aún así, reconoce «soy fuerte, he resistido un cáncer. Mis niños me ayudaron mucho para superarlo» En estos días, Antonia María ha llamado a un primo policía local de Marchena para poder contarlo a los medios de comunicación. Por eso en RTV Marchena le hicieron la primera entrevista. Después ha atendido a ABC y asegura que «quiero que lo sepa todo el mundo. Hemos estado abandonados , aquí no ha venido nadie, ni de la policía ni del Ayuntamiento». Antonia María se fue a Torrent con 12 años pero ha visitado mucho su localidad natal desde entonces. « Le doy las gracias a Marchena », dice porque le han ofrecido dinero y cualquier cosa que necesite, pero insiste en que ella está bien, no necesita nada más que aparezcan «mis niños». Mientras, espera que su hijo sea fuerte y siga adelante «si no se dejó llevar por la corriente fue por su mujer». Ella vive en un piso alto y no se ha visto afectada. «No me hace falta nada, tengo comida de sobra en el frigorífico pero sí necesito saber donde están mis niños. Aquí ha muerto mucha gente»
abc.es
Una vecina marchenera de Torrent busca a sus dos nietos: «La fuerza del agua se los arrancó a mi hijo de los brazos»
Izan y Rubén, de 5 y 3 años, son los nietos de la marchenera Antonia María Matías y permanecen desaparecidos a causa de las lluvias torrenciales caídas en el pueblo valenciano de Torrent después del paso de la DANA . A las seis de la tarde, estaban en su casa con su padre, Víctor Matías, cuando la tromba de agua los sorprendió derrumbando el edificio. Según cuenta la abuela, « cayeron al barranco y la fuerza del agua se los arrancó de los brazos». No los han vuelto a ver y están preparados para lo peor «el agua arrastraba de todo, no han podido sobrevivir a esto». A Víctor también se lo arrastró la fuerza del agua. Ha contado a su familia que se agarró a la rama de un árbol y resistió hasta las cinco de la madrugada « sólo con la cabeza fuera », cuenta su madre. Y es ella la que pide ayuda para encontrar a sus nietos porque «hasta hoy no nos están ayudando a buscarlos, sólo mi hijo pequeño y unos amigos están desde primera hora intentando encontrarlos». Víctor está en el hospital por la infección de las heridas que le provocó el agua y todos los elementos que arrastraba. «Posiblemente lo tengan que volver a intervenir», dice Antonia María. Y también está segura de que va a necesitar de tratamiento psicológico o psiquiátrico . «Está desconsolado , le han llevado dos toallas de playas de mis niños y está agarrado a ellas». Pero Antonia María, de 72 años, insiste en contar todo desde primera hora para dejar claro cómo ha sido la tragedia vivida. Estuvo con sus nietos hasta poco antes de la hora fatídica, «no dieron la alerta hasta dos horas después de pasar todo, pero sí dijeron que iba a llover y le dije a mi hijo que no los llevara al colegio, estuvieron todo el día conmigo». Pero Víctor, viendo como se ponía la tarde, salió antes de trabajar para llevarlos a casa. « Fue la última vez que los vi », cuenta la abuela. Una vez que el hijo llegó a su casa con los pequeños, Antonia María cuenta que «su padre les estaba haciendo la cena cuando el techo y las paredes se derrumbaron. Justo a lado de su casa hay una parada de camiones, los camiones rompieron la pared por la fuerza del agua». Así se lo ha contado a ella una vez rescatado. «Un vecino dio el aviso de que mi hijo estaba en el árbol y, después de rescatarlo , le hicieron una cura de emergencia y lo llevaron al pabellón. Mientras, mi otro hijo, mi nuera y yo estábamos sentados en el sofá sin saber qué hacer. Mi nuera intentó ir a su casa pero ya no podía», cuenta con la voz muy afectada por el sufrimiento de los últimos días. Aún así, reconoce «soy fuerte, he resistido un cáncer. Mis niños me ayudaron mucho para superarlo» En estos días, Antonia María ha llamado a un primo policía local de Marchena para poder contarlo a los medios de comunicación. Por eso en RTV Marchena le hicieron la primera entrevista. Después ha atendido a ABC y asegura que «quiero que lo sepa todo el mundo. Hemos estado abandonados , aquí no ha venido nadie, ni de la policía ni del Ayuntamiento». Antonia María se fue a Torrent con 12 años pero ha visitado mucho su localidad natal desde entonces. « Le doy las gracias a Marchena », dice porque le han ofrecido dinero y cualquier cosa que necesite, pero insiste en que ella está bien, no necesita nada más que aparezcan «mis niños». Mientras, espera que su hijo sea fuerte y siga adelante «si no se dejó llevar por la corriente fue por su mujer». Ella vive en un piso alto y no se ha visto afectada. «No me hace falta nada, tengo comida de sobra en el frigorífico pero sí necesito saber donde están mis niños. Aquí ha muerto mucha gente»