Encuentran un cuarto cuerpo junto a la desembocadura del arroyo de Letur en el río Segura
El lunes por la tarde se localizó otro cadáver sobre cuya identidad hay “dudas razonables” y se están realizando más pruebas periciales
La Confederación del Segura dice que la última limpieza de cauces en el entorno de Letur se hizo en 2022
El delegado del Gobierno de Castilla-La Mancha en Albacete ha informado en la tarde de este martes del hallazgo de un cuarto cuerpo entre los restos de sedimentos generados por la riada que asoló Letur hace una semana. No hay todavía confirmación sobre su identidad, pero se trataría de un varón, según los primeros datos que ha ofrecido Pedro Antonio Ruiz Santos.
El cuerpo se ha localizado en el punto de desembocadura del arroyo en el río Segura, a unos cinco kilómetros de la localidad. Es una zona donde ha quedado acumulado todo el sedimento de la riada del pasado 29 de octubre que, en tres oleadas, dejó un total de seis personas desaparecidas. Cuatro han sido ya localizadas, aunque hay dos sin identificar.
Casi 100 efectivos están dedicados a la búsqueda de las personas desaparecidas, con apoyo de las unidades caninas. “La búsqueda está siendo muy compleja”, ha comentado, y se extiende en un terreno donde hay hasta dos metros de sedimentos, sobre los que están trabajando las máquinas, además del apoyo de lanchas.
Ruiz Santos ha desvelado que se pidió autorización a la Confederación Hidrográfica del Segura para rebajar el caudal del río. En concreto se ha pasado de 1,5 m3 por segundo a 0,75 m3 por segundo “para trabajar con mayor rapidez”.
Siguen las tareas para identificar otro cadáverEn la tarde del lunes se localizaba el tercer cuerpo de una persona cuya identidad está siendo analizada. La Guardia Civil informaba a lo largo del martes que existen “dudas” acerca de la identidad del cuerpo encontrado a unos 500 metros de la rambla de la localidad. Se comunicó en un primer momento que se trataba de un varón, en concreto de Jonathan, un joven desaparecido junto a su pareja. En una segunda comprobación de la Guardia Civil han “surgido dudas” respecto a su identidad.
El coronel jefe de la Guardia Civil, Jesús Manuel Rodrigo, ha señalado que esas “dudas razonables” surgieron al aplicar el protocolo correspondiente y que serán necesarias más pruebas periciales para confirmar de quién se trata.
“Hasta que no esté confirmada la identidad no podemos decir exactamente de quién es el cuerpo hallado”. Rodrigo añade que cerca de 40 efectivos de la Guardia Civil están trabajando en la zona. En la localidad se busca todavía a otras tres personas desaparecidas.
El delegado de la Junta de Comunidades en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos explicó que el cuerpo se encontró bajo “mucho lodo y material” y los restos fueron enviados al Instituto Anatómico Forense de Madrid para realizar los análisis de ADN.
Una de las unidades caninas que trabaja en la localidad daba el aviso en la noche de este lunes que permitió el hallazgo de los restos humanos. Los trabajos se intensificaron entonces en la zona.
“Los trabajos en la búsqueda de personas desaparecidas son la prioridad”, afirmó Ruiz Santos, que explicó a primera hora de que en el lugar se está trabajando de forma manual porque la maquinaria no puede acceder.
En esas primeras horas se reunió a las cuatro familias de las personas desaparecidas para que estuvieran presentes y se les pudiera comunicar el hallazgo. “Esto no va a parar, las labores continúan, hemos aumentado el dispositivo a 17 máquinas y la unidad canina sigue trabajando de forma incesante y esta noticia queremos trasladarsela para que no haya incertidumbre”, zanjó Ruiz Santos.
Tras las primeras horas de la inundación se localizó a una mujer de 92 años, Dolores, junto a la depuradora de la localidad. Después, el domingo 3 de noviembre se localizó el cuerpo de una de las personas que se buscaba en la localidad. Se trataba de una mujer de 70 años, cuyo cuerpo se encontró a 12 kilómetros de la localidad albaceteña. La mujer, Antonia, se encontraba en su domicilio ubicado en uno de los puntos por donde pasó el torrente de agua, que la habría arrastrado. A su muerte se suma la de Dolores, una vecina de 92 años cuyo cuerpo sin vida se encontró en las primeras horas tras producirse la riada.
En la localidad todavía se busca a dos personas, una mujer y un hombre, que siguen desaparecidos.
Acceso al casco histórico y estudio de las viviendasEn paralero, hoy el el presidente de la Diputación de Albacete, Santi Cabañero, ha resaltado que el Servicio de Arquitectura de la institución sigue trabajando en la localidad, donde se han identificado diez viviendas con daños estructurales tras la riada. Cinco ya han sido derribadas.
A partir de este martes, explicó Cabañero, el equipo de profesionales ha podido acceder a nuevas partes del pueblo para valorar la situación. “Hay mucho escombro dentro de las viviendas. Hay muchas cuevas dentro de las propias casas y este trabajo va a ser minucioso y lento”, señaló. Por eso, ha advertido de que “nadie puede entrar a una casa si no es segura” y que por ahora solo pueden entrar arquitectos en las zonas a las que todavía no se podía acceder.